La
actual crisis migratoria que vive la Unión Europea está alcanzando niveles que
sobrepasan las proyecciones de los organismos de los países europeos y está
trayendo una potencial crisis humanitaria y económica al continente.
El
ascenso del número de migrantes, que se cuentan por miles cada semana, ha
causado que muchos de los países de la Unión Europea hayan elevado las alarmas,
en búsqueda de una solución en consenso. Hungría ha sido uno de los más
afectados, junto a Grecia, pues son la puerta de entrada a la zona Schengen, y
reciben el mayor impacto pues en sus fronteras y estaciones de trenes pernoctan
miles de inmigrantes, que han logrado llegar después de una travesía por mar y
tierra hasta el territorio Magyar. De hecho su ministro de relaciones
exteriores ha dicho que "Lo que ha pasado en Hungría desde anoche (4 de septiembre) es
consecuencia del fracaso de la política de migración de la UE y de las graves e
irresponsables declaraciones hechas por políticos europeos". Esto se debe
a la decisión de Alemania y Austria de recibir a los migrantes, y de procesar
sus solicitudes de asilo, a pesar de no ser el primer país de la unión que los
recibe, política que contradice lo acordado previamente en las políticas
comunitarias migratorias de la Unión.
Lo
cierto es que muchos apoyan estas medidas, pues como ha dicho el primer
ministro de Luxemburgo la prioridad es evitar que los migrantes pierdan la vida
tratando de llegar a Europa, como ha sucedido ya en innumerables casos de
personas ahogadas durante su travesía por mar o incluyo asfixiadas dentro de
camiones donde se movilizaban por las carreteras de Europa.
¿Cómo
afectara económica al Eurogrupo? Por una parte los subsidios que dan algunos
países (principalmente Alemania) están creando una carga fiscal que aunque
pudieron prever, se ha salido de sus presupuestos. Esto creara un déficit
presupuestario que deben atender, antes que se vuelva una bomba de tiempo. Por
otra parte, la política migratoria europea se ha visto sobrepasada en sus
proyecciones, pero sigue representando una solución para la crisis de falta de
fuerza laboral a medida que la población europea sigue
envejeciendo.
La llegada de nuevos trabajadores debería ayudar a solucionar este problema.
Pero si hay tanto desempleo en Europa, ¿como se explica que hagan falta
trabajadores? No faltan ahora, faltaran dentro de algunos años.
Y
además de estos problemas económicos, están los problemas de seguridad, pues el
espacio Schengen ha sido penetrado por muchas personas que huyen de la guerra,
es cierto; pero también puede ser aprovechado por organizaciones terroristas
para infiltrar seguidores y causar atentando dentro de Europa.
Es tema
complejo, una crisis humanitaria que requiere la colaboración de Europa para
resolver, pero que no puede buscar como solución recibirlos a todos sin pensar
en las consecuencias a largo plazo. Deben manejarse planes de reparto, como se
ha venido ejecutando, pero también hacer esfuerzos diplomáticos para solucionar
el conflicto sirio, que ha causado esta catástrofe social.